SquashGrandísimo jugón dónde los haya, ¿verdad?. A mi me pilló muy joven y poco o nada pude disfrutar de esos pases en profundidad mirando a qué se yo dónde. Era increíble ver la habilidad y concentración que tenía para poner los ojos en cuenca y la pelota dirección “Sebastopol”. No les voy a mentir y tampoco alegrar con la vuelta de este “ GRAN DANÉS”, pero déjenme ilusionarles con otros maestros de la misma envergadura.

Dice mi abuela, para mi una gran filósofa: “ Javier, hijo mío, la casa nunca se empieza por el tejado”. Pues bien, lo siento abuela, pero esta vez creo que es mejor empezar por arriba y poco a poco ir bajando.

Allá voy….

Estoy en una habitación de un hostal de mala muerte en un pueblo cerca de Marsella, Nimes. Ahora mismo, mientras escribo estas líneas, tengo en la habitación a dos futuras promesas del squash mundial, tengo tantas cosas que aprender, tantas preguntas que hacer… pero ahora es el momento de deleitarles con la magia que hace un año me sedujo y me enamoró:

Probablemente a muchos les suene a chino mandarín esto del squash. Les pondré en situación pero de una forma algo diferente. Primero daremos unas pinceladas objetivas de lo que es el squash. Un cuadrado cerrado de 9,75 m de largo por 6,40 m de ancho. Con 3 paredes ( 2 laterales, 1 frontal) y un rebote de cristal. Una raqueta que parece un cazamariposas, y una pelota que no tiene mucha pinta de andar muy rápido. Probablemente esta es la visión de alguien que no haya jugado a este deporte. Yo hace cosa de un año pensaba así. Un buen día un gran amigo me dijo, ¿Porqué no pruebas esto del squash?. A día de hoy le digo… Gracias Javi por engancharme a esta droga.

Pasión, fuerza, entrega, superación, sufrimiento, velocidad, espectacularidad… y probablemente me dejo una larga lista de cualidades de este magnífico deporte. Esto es el squash.

¿Alguien sabía que en olympia contamos con las 5 mejores de toda valencia?. ¿Alguien sabía que ligas squash valencia, utiliza nuestras pistas como sede de la liga de valencia de squash?¿Alguien sabe que de vez en cuando la FSCV organiza torneos en nuestras pistas?.

Este pasado fin de semana estuvimos en Nimes, Francia, en un torneo satélite de la PSA. Algunos estarán pensando… con el tiempo que hizo no lo debieron pasar muy bien. Pues están en lo cierto, la llegada fue toda un incógnita hasta que tras 10 horas de viaje ( casi el doble que la vuelta) conseguimos llegar. Pero mereció la pena.

Comienza el torneo y algo se respira bonito en el ambiente: ilusión, fuerza, nervios, competitividad..

Y aquí va, nuestro Michael Laudrup entra en pista. Todos los jugadores enseñan unos golpes increíbles, una técnica depuradísima, un físico portentoso, un saber estar en la pista digno de auténticos profesionales, pero hay alguien que tiene algo más. Si tenéis el placer de poder disfrutar de él en un buen partido, lo apreciaréis enseguida. DISFRUTA de su trabajo, le encanta estar en la pista, está en su elemento. Empieza el partido y empieza la magia. Hubo una jugada que me marco especialmente y que da título a este pequeño y sentido homenaje. Tras un rallie muy intenso y de gran velocidad, el jugador español juega una cruzada casi perfecta, el inglés se retuerce sobre sí mismo y consigue jugar un boast. Nuestro “Michael made in Spain” arranca cual gacela y entra de drive con todo el tiempo del mundo, pero justo dos segundos antes de golpear a la bola, gira la cabeza al lado contrario escondiendo su brazo de manera que el destino de la bola es una incógnita. En ese momento yo pienso ¿Está loco?. El inglés titubea y PUM, un golpe seco y certero conduce la bola con una velocidad endiablada dibujando una paralela perfecto. ¿Y el inglés?, pues creo que sigue buscando su cadera en la T.

Lleno de orgullo, giro mi cabeza y le digo a un chico francés del club, ¿Do you know Michael Laudrup?, Is here, in Nimes. Y ambos echamos a reír.

Si quieren disfrutar de un deporte realmente intenso, llego de deportividad y carente de cualquier minuto de aburrimiento, les recomiendo una buena partida de squash.

Fco. Javier Guerrero López